Cómo empecé - Parte 2
Adolescencia
Cuando entré en la secundaria, supongo que como cualquier adolescente, me sentía sapo de otro pozo. Me sentía desubicada, como que no encajaba. Siempre me guié mucho por lo que dijeran de mi, los comentarios me dolían mucho, entonces siempre intenté hacer todo para encajar y cumplir las expectativas de los demás. En el medio, me fui olvidado progresivamente que yo soy una persona y merezco ser escuchada, tenía y tengo miles de virtudes que progresivamente fueron apagándose hasta quedarme solamente con una parte de mi ser.
Hockey y curso de ingreso
Como sabran, siempre valore mucho mas inteligencia que mi fisico. Toda la vida el sobrepeso fue un problema entonces en algun punto decici dejar de torturarme con las dietas y enfocarme en mi carrera. Mi mama siempre me incentivo a seguir aprendiendo ingles, y le agradezco infinitamente porque gracias a eso llegue hasta donde estoy. Sin embargo, no tengo recuerdo de que me haya incentivado a hacer algun tipo de actividad fisica. En el ultimo año de la primaria decidi empezar entrenamientos para hockey en el Club Ciudad de Buenos Aires, o Muni, como lo llamaban quienes estaban ahi desde siempre. Siempre fui muy influenciable y cambiante, entonces empezar algo nuevo no era algo completamente extraño para mi. Habia dos chicas “populares” en el colegio que hacian hockey ahi, y yo por supuesto queria sumarme.
Me encantaba, aunque tuviera que levantarme a las 6 de las mañana para ir a los partidos que eran a las 8, o tuviera que ir en invierno a los entrenamientos lunes y viernes a las 18, me encantaba. Soy muy competitiva, y competir en equipo se sentia super natural. Pero, se terminaba la primaria, y mi mamá eligió el Instituto Santa Ana y San Joaquin como secundaria para mi. Yo queria ir al Liceo 9 como mis dos mejores amigas, pero mi mamá insistió (por no decir “me obligó” jajaj) con que vaya al Santa Ana. (Aclaracion: en el Santa Ana conoci personas maravillosas y a una de mis mejores amigas). Accedi porque no me quedaba otra, pero el curso de ingreso era miercoles y viernes a las 18. Si, coincidia con el entrenamiento de hockey, y una vez mas y con mucha tristeza, deje de ir a hockey.
Gimnasia artistica
De los 12 a los 17 hice gimnasia artistica y ritmica en el Santa Ana, ademas de comedia musical. Conoci un area de entrenamiento que nunca habia visto y me fascinaba. Encima, para mi sorpresa, contaba con el don de la flexibilidad que es muy necesario para la disciplina. (Pausa para llorar, porque recuerdo lo que sigue despues de esto). Durante estos años, me rompieron el corazon varias veces, y mi autoestima seguia bajando.
Pareja toxica
Durante mis años formativos más importantes, me puse de novia con una persona que hoy veo era altamente tóxica, y me volvía altamente tóxica a mi. Fue un ida y vuelta, llantos, histeria, autoflagelación, es un tema que merece un post completamente aparte. El era muy inseguro, y trasladaba su inseguridad a mi. Al principio el control parecía simplemente amor, hasta que empece a notar muchos años después que era solo inseguridad. En su miedo a “perderme”, me regalaba golosinas y chocolates de forma constante, porque luego entendí que él creía, consciente o inconscientemente que cuanto más gorda estuviera menos me iban a mirar y menos posibilidades había de que lo dejara.
Toda esta relación me hacia sentir poco digna de cariño, sumado a una crisis de identidad enorme por pensar que si mi madre biológica no me había querido, por qué alguien más lo haría. Y creía merecer eso que él me daba.